domingo, 3 de mayo de 2009

Sobre Noches de cuerpos sin nombre


por Ruber Carvalho

Albanella Luena no es solamente una muchacha que escribe y sueña, que camina por la ciudad, que escucha a la gente, que sonríe y tiene una lágrima escondida para regalarle al viento, sino que también vuela, que tiene alas. Los hombres sabemos que sólo las mujeres tienen el privilegio de volar y nosotros de contemplarlas extasiados desde la tierra.

Pero Albanella no solamente vuela por volar sino que para hacer de las nubes sus palabras, y de los azules del cielo sus pinturas de sus cuadros redondos de poemas que rezuman ilusiones, nostalgias, recuerdos, deseos íntimos, infinitos.

De esas palabras, de esas nubes, está hecho este libro, este sueño, esta nube…esta noche sin nombres ni cuerpo…o quizá de muchos cuerpos con tantos nombres!

“Todos los días/ te traeré/ una pena/ con cuidado”… o…”porque los recuerdos/ simplemente/ saben a otro tiempo”. De esas palabras que Albanella fabrica a diario de sus nubes está hecho este libro de infinitas sensaciones.

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